Click on image for full screen


CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA03-scaled

LA NATURALEZA ... (Estudio periferia vol I)
2019-20 / ACTION

Artelier García Pistas

.

La tela se extiende de lado a lado de esos muros ajados sin la intención de ornamentar el espacio vistiéndolo o cubriéndolo; la tela, empero, sirve de vínculo. En verdad, el vasto lienzo que se apoya sobre ese bastidor de tiempo petrificado de ladrillo o cemento sirve de límite sensible y actúa de puente entre pasado y presente, entre lo “invisible y lo visible”, y no solo de soporte pictórico.

.

The canvas stretches from one side of these worn walls to the other, without the intention of embellishing the space by dressing or covering it; the canvas, however, serves as a link. In fact, the large canvas resting on this petrified time frame of brick or cement acts as a sensitive boundary, a bridge between the past and the present, between the "invisible and the visible", and not only as a pictorial support.

 

 

 

CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA06-scaled
CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA02-scaled

Points of view. García Pistas. Logroño. 2019.

IMG_1218
CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA10-scaled

Points of view. García Pistas. Logroño. 2019.

CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA12-scaled
CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA11-scaled
CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA07-scaled
CARLOS-ZORROMONO-LA-NATURALEZA-DE-LA-BESTIA08-scaled

Points of view. García Pistas. Logroño. 2019.

 

 

LA NATURALEZA DE LA BESTIA 

ACTIONS / SITE SPECIFIC, Logroño / OCT 2019 - JUN, 2020

Proyecto profesionalización XXXV Muestra de Arte Joven En La Rioja. 2019.

 


ABOCADOS - Julio Hontana (extracto)

Algunas de las huellas de esta degradación las identifica nuestro artista con los vertederos en los que hemos convertido los cauces de los ríos o los cadáveres arquitectónicos que se descomponen erosionados en mitad de un paraje. Tras seleccionarlos y visitarlos – pues Carlos se desplaza y refunda su estudio en aquellos espacios que piensa propicios para cumplir su plan – nuestro artista coloniza con tela esa ruina contemporánea, ya sea una fábrica de yesos a punto de derrumbarse o el desnudo muro de una hacienda carcomida por el abandono, sostenida únicamente por las zarzas y la inmundicia. La tela de lienzo que Carlos Zorromono extiende de lado a lado de esos muros ajados no tiene la intención de ornamentar el espacio vistiéndolo o cubriéndolo; la tela, empero, sirve de vínculo. En verdad, el vasto lienzo que se apoya sobre ese bastidor de tiempo petrificado de ladrillo o cemento servirá de límite sensible y actuará de puente entre pasado y presente, entre lo “invisible y lo visible”, y no solo de soporte pictórico.

La feroz acción pictórica que Carlos desenvolverá sobre la tela a base de esa pintura negra como el engrudo, tan suya, no pretende ser copia fiel de nada existente, ni calco ni recreación de una ausencia, ni mucho menos un trampantojo falaz y estúpido, sino que aspira a ser el territorio de una lucha, el lugar de una íntima liturgia de la que solo el artista conoce el acceso y los riesgos, y donde la tela acabará siendo, con permiso de J. G. Frazer, un poderoso objeto de “transferencia” que troque el mal en bien. Y en último término, cuando la obra alcance la sala de exposiciones, el lienzo, los objetos, hasta la luz misma que todo lo ilumina, se transformarán en ofrenda en este altar.